Apartandonos del Caos: Todos los que estaban en el Vestibulo <-- seguimos aqui

*Llega cansado y agitado a donde se encontraban sus compañeros...era malo localizando a los demas pero ahora era sencillo las energias eran claras...llega y los mira a todos*

-Oigan necesito ayuda los profesores al parecer temrinaro su pelea necesitamos ayudarles estan en el suelo...-

*Dice en un tono preocupado...aun si no los conocian habia dando su mayor esfuerzo y ncesitban ayuda*

*Algo confusa, y por lo general desorientada, sólo atina a dejar el cuerpo de Caitlín en otro sofá de donde descansaba el cuerpo de Yosep y sentarse por inercia junto al cuerpo de ésta, resoplando... Oyó el estruendo del ente en la lejanía y la repentina bajada de temperatura sintiendo sus huesos repiquetear por el contrastre entre el calor y el frío. Sentía como su garganta, seca le gritaba que saciase aquella necesidad, pero apenas podía ni tan siquiera parpadear, así que apoyó la cabeza en el respaldo del mueble y dejó cerrar sus ojos, permitiendo reentablar algo de serenidad en su afrontación mental que estaba llevando a cabo... "Soy un peligro... soy un maldito y estúpido peligro para la academia", sus ojos en seguida se inundaron de lágrimas que derramaron con la misma rapidez por sus mejillas. Oyó la voz de la que había socorrido a sus compañeros y a ella, por lo que dedujo sin pensar y por su tono que era una alumna, pero no llegó a verla (debido primero a que tenía los ojos cerrados y luego que aunque los tubíese abiertos, vería una figura distorsionada), trató de responder pero el sonido de sus sollozos no la dejaron decir nada entendible, por lo que prefirió guardar silencio. "Bien... estoy loca, pero no soy idiota... Asumiré mi castigo y pediré mi expulsión de inmediato haya cumplido con mi condena... si eso es lo que soy, un peligro, mi destino no es estar rodeada de seres..." su mente se debatía en colapsos con imágenes del pasado entremezclados con lo que recién había vivido.*

[Dakota te voy a arrojar por un acantilado e_e]

*Mis ojos se abren lentamente, los orbes volvieron a su color natural, aun sentia el agotamiento en mi cuerpo.se podia sentir mas tranquilidad en el ambiente que me encontraba, no sabia exactamente donde, pero ya todo habia terminado. Volteando la mirada a un costado podia obervar a varios alumnos, entre ellos Dakota, supuse de inmediato que ella fue la que me salvo, estaba en deuda con ella. Tambien se encontraban Cassie y Chester. Por un momento me pongo a pensar en los cambios sentimentales de los vampiros, haciendo que rie por lo bajo. Podia escuchar el sollozar de Rayne. Me sentia un poco mal por ella, se que solo intentaba ser de ayuda. Soltando un suspiro leve quedo en silencio con la mirada al tejado, pensando en las veces en que podria atacar ese ente. Quien sabe cuando atacar de nuevo, definitivamente esto era una molestia.*

*Escucha lo que una de sus compañeras le dice y siente con la cabeza algo sorprendido pero era cierto si iban serian castigados si no es que peor...camina para ayudar a las chicas que iban entrando acercandoce para ayudarlas a levantarse y a irse a descansar era obvio que lo necesitaria*

~Abro los ojos con vista nublada apenas podía distinguir las figuras, parpadeo con un poco de molestia frunciendo el seño y me toco la frente cerrando los ojos nuevamente; mis ojos blancos aun seguian en ese estado, abro la boca para intentar preguntar a donde me habian traído pero no me salía ni una pisca de sonido sobre mis cuerdas vocales, me cubro los labios rapidamente con un rostro lleno de frustración, era lo que sucedía cuando perdía mucha energia quedaba muda por cierto tiempo no sabía cuan grave podría ser el problema. Me siento rapidamente donde me tenian recostada y vuelvo a parpadear moviendo mi cabeza ligeramente de izquierda a derecha recuperando mi vista rapidamente pudiendo distinguir a Samael, Yosep y mi compañera a quien aun no le sabía el nombre y tres personas que aun no conocía. Doy un suspiro frustrada ya que estar muda sería un problema andaba pensando en como comunicarme con el resto. Me levanto debilmente del sofá y me alejo un poco de ellos estando en el mismo pasillo que ellos simplemente que apartada sin causar problemas~

○¿Cambio de escenario? o.0○

*Me encontraba con los ojos cerrados, boca arriba en el mueble. No sabia en que pensar, realmente no sabia ni que hacer. Mi cuerpo habia descanzado lo suficiente para incorporarme, sentandome en el mueble, observando a los alumnos que continuaban en la sala. Todo se encontraba en un silencio funebre, como si todos se encontraban de igual forma pensantes y a la vez desanimados. Aun asi, habia razon para aquello, el ente habia vuelto atacar y esta vez ocasiono una destruccion mas atroz.*

*al pasar los minutos decido ponerme de pie para retirarme a mi habitacion, aun me encontraba agotado y tenia que refrescarme. Sabia lo que vendria despues, o al menos tenia una idea. Mirando a Dakota un segundo agradeciendole con la mirada ladeando la cabeza, salgo fuera de los pasillos a paso lento en direccion a las habitaciones*

*Cambio de Escenario*

*Tomando mucho autocontrol, la vampira levanta su rostro para observar a Dakota con una mirada aún perdida y desorientada. Físicamente estaba mal, preservaba la herida de su cabeza y la cintura que ambas le ardían como metal a fuego vivo aunque habían a notarse pequeñas costras por el contorno, señal de que se estaban autosanandose, pero aún era una notoriedad muy leve, aunque la sangre sí había cuagulado por completo. Aquello era sus peores herídas, las cuales las acompañaban algunas quemaduras leves y rasguños que parecía dibujar un mapa en su cuerpo, moratones que si distorsionaban más, parecían tatuajes mal hechos, pero lo peor lo estaba sufriendo dentro de su mente:

-Mi intención... sólo era de prevenirles... mi... locura... es un peligro... yo.... debí preveérlo, sólo fui porque era mi deber como vampira... aquel ser... lo había visto dentro de mi cabeza... no... no quería salir huyendo como llevo haciendolo 66 años... tal vez la adrenalina y... -Remontó el momento que sintió la satisfacción de ver como su poder trasncurría bien hasta que al haber entregado todo su poder, éste se esfumó como el humo de un cigarrillo cuando lo apagas y todo fue un completo desastre.-... Soy un maldito peligro... no debería estar aqui siquiera... -Golpeó con su puño izquierdo el cojín del sillón donde estaba sentada, al menos, había dejado de llorar aunque las lágrimas seguían recorriendo sus pálidas mejillas. Guardó silencio trás el momento tenso que sólo duró unos segundos, el cuál asintió al escuchar a la chica aconsejar que guardásen el momento de la llegada de los profesores... y su castigo, pensó, por haber sido tan osada y atrevida poniendo a todos en peligro. Suspiró una bocanada de aire que había logrado llenar sus pulmones muertos, dejandolos nuevamente salir lentamente como si realmente no quisiera hacerlo y mantenerlo en su interior. En ese instante observa como el chico que también había sido involucrado en el ataque se levanta y se retira, la Bansheé también se aparta y ella misma tan sólo apoya su barbilla en el espacio que queda entre ambas rodillas por haber vuelto a una postura fetal, abrazandose las piernas y mirando hacia algún punto, ya que no estaba prestando atención en su sentido de la vista, estaba consumida en aquella frustración*

*Llega al sitio en el que se encontraban los alumnos con el semblante serio, paseando los ojos por cada uno, sabía bien a los que tendría que castigar más tarde, en el momento lo primordial era ver por el estado fisico y emocional de cada uno, mira hacia Chester y Cassie dejando la mirada unos segundos en ellos, el chico era vampiro y faltaba la joven hada, se encamina hacia ellos y les hace una señal con el dedo para que lo sigan y continua caminando por el pasillo directo a su oficina*

*Cambio de escenario*