Una Dulce Llegada

Un breve jalón de las manillas y se abren dos enormes puertas descubriendo el gran vestíbulo, muy elegante en comparación con la parte exterior del lugar, allí estaba, rodeada de mas y mas lujo, su esposo, quien yacía a su lado, listo para su protección, observaba el lugar con atención.

*Aishbelt eleva la nariz* Necesitaba darle la primera aspirada al aire en busca de algún rastro o indicio de otras criaturas, leves aromas se asomaban: alguno suave, otros fuertes y desagradables.*Sacude la cabeza* - no encuentro nada amado mío - Dirigiéndose a su compañero con voz ronca e incolora debido al agitado viaje, azotando el silencio del lugar. Gira su cuerpo con el ritmo de las manecillas del reloj, tan grácil, tan pequeño, observa a su compañero dándole una mirada de descanso y bienvenida - aquí estamos amor - arrojándose hacia él, estirando sus brazos, colgándose de su cuello, su rostro frente a él, refleja una sutil ternura acompañándola de una picara sonrisa. - Ahora solo deseo un beso tuyo -.

Todo un deleite de sabores se adornaron en sus labios alimentándose de su esencia, solo pensaba en no apartarlo nunca de su lado, un pequeño cosquilleo en su tobillo la despertó del encantador instante, baja la mirada en busca de aquella distracción, un felino de machas grises se paseaba por sus pies, frotando una y otra vez su suave pelaje blanco, * sonríe abiertamente soltando a su compañero en un instante, doblando su torso y estirando sus brazos para levantar al felino y acobijarlo en sus brazos* -No seas celoso tontito- ofreciéndole una mirada de ternura y alegría, -los amo a los tres- su minino quien ronroneaba en sus brazos frotándose de su pecho cálidamente, de repente, lanzo una zarpada directa a Jebs mostrándole los colmillos y mirándolo con recelos, *Aishbelt sonríe largamente y con gracia* -Persiam jajajajaja no debes aruñar a Jebs hahahahah tu eres mi rey- sus ojos entrecerrados se cristalizaban con el venir de la risa. Su gato quien aún seguía en sus brazos lanzo una mirada furtiva y vencedora a Jebs, voltea sus ojos para ignorar al compañero de su ama para acurrucarse y ronronear en el regazo de ella.

Aishbelt asiente, dándole una suave sonrisa, *inspecciona una vez más el lugar mirando a todos lados*, su gato en sus brazos la mira con algo de disgusto y tristeza… *Aishbelt lo mira entrecerrando los ojos* -creo que alguien tiene hambre- *sonríe* –Si amor vamos a buscar los dormitorios para poder dejar las pertenecías, buscaremos algo de comer para ellos y veremos si nos permiten cazar por el rededor del castillo, hemos llegado tarde a la academia-; le da un beso mordiendo su labio inferior saboreando un bocadillo de su sangre, da un paso atrás dejándole ver su rostro con picardía y una sonrisa de deseo –TE AMO-, toma su mano y camina con él a su lado.