Reto 1: Ingresar a la clase

*Llegar hasta el lago no había sido nada especial, contaba con las instalaciones de la academia en sus proximidades aunque se apreciaba la temperatura nocturna como una fuente torrencial, pero lo agradecia, agradecia aquel frescor en su piel. La oscuridad dibujaba su silueta magistralmente y sus ojos verdes (en real bicolor) brillaban con el reflejo de la luna hechizándolos sobrenaturalmente. Su aroma a fresas seguía desprendiendose a través de su piel y sus cabellos, aunque sonrío ante la idea de que en breves eso dejaría paso a un aroma más personal, más suyo. Se mantuvo en pie parada ante el terreno húmedo, visualizando en su campo de visión cada detalle de la vegetación y la superficie móvil del agua para hallar la ubicación exacta de las cintas. Claro que en la aportación del profesor Alexander ya sabía más o menos dónde encontrarlas y efectivamente, colgadas sobre unas varas descansaban varias cintas de colores sobre una plataforma que quedaba suspendida sobre la superficie acuática. Alrededor estaban las demás plataformas movíbles que, junto con las varas parecían danzar en un baile lúgubre y armoníoso.
El vaho por la temperatura pronto se apreciaría por la comisura de sus labios, se frotó las manos para hacer crugir los nudillos, estiró una pierna y luego la otra para recalentar los músculos de sus muslos. "Bien..." Dió un brinco ligero, agil como el de un gato para caer en la primera plataforma comprobando que activaba a las demás en unos movimientos más estratégico. Se mantuvo parada estudiando la tayectoria de la segunda plataforma con una mirada serena. La brisa hacia remover sus cabellos por su espalda, notaba el cosquilleo de las puntas de algunos mechones por sus mejillas pero trató de no enfocar una reacción mecánica para apartarlo. Mantuvo la postura, ahora se cercioraba de la tercera plataforma, como había especificado el profesor "sólo pueden pasadas desde el principio". encadenó los movimientos de la segunda y tercera, luego la cuarta... hasta tener una trayectoria planificada dentro de su mente, ahora debía correr el riesgo de comprobar cuán debía ser la fuerza que ejercería para saltar de plataforma en plataforma. Dedujo que cada plataforma obtendría una cantidad aproximada sobre el peso, fuerza y presión que podría contener, así que basicamente debería jugar un poco con la estabilidad de sus saltos. Dió otra bocanada de aire y comenzó su carrera en brincos por las plataformas.
Cayó en la segunda apoyando las palmas de sus manos con el cuerpo agachado, milésimos segundos tardó en notar como la plataforma se hundía en el agua, para cuando las plantas de los pies tocaban el agua ya había calculado su siguiente brinco y ya estaba en el tercero. Pero el tiempo no se detenía y las plataformas tampoco, agudizó como un animal salvaje sus sentidos, sentía su bestia agitada en su interior por la destreza recién liberada. No era menos sentírse como cuando corría en plena noche cerrada por las praderas, sintíendose libre y salvaje. Apreciando como cada articulación, tendones y músculo se ejercitabán palpitantes y calientes por la presión física... Uuuh, desde luego eso iba a doler, pero mientras estuvíese en caliente aquello era pura adrenalina en todo su fulgor y si su corazón latiese con vida, estaría eufórico dentro de su caja toráxica bombeando y pulsando agitadamente.
Dió un brinco hacia su lado derecho para caer en otra plataforma sobre pie derecho, impulsarse con el mismo para brincar nuevamente hacia el lado izquierdo y caer sobre su pie izquierdo en otra plataforma con unos movimientos muy concisos y ágiles. Ante su peso en los mismos, notaba el agua salpicar, cayendo gotas en su rostro brillante y húmedo a causa del sudor, el vaho se apreciaba más debido al cambio de temperatura, ella misma estaba en calor mientras la atmósfera estaba en un punto casi de congelamiento. Tambaleó en la última plataforma que le daría paso a la que llevaba las varas, amenazando con caer al agua, cuando observó que ésta no disponía de espacio para sostener un cuerpo, sólo estaban las varas. Todo se ejecuta en cuestiones de segundos ya que la plataforma comenzaba a hundirse bajo su peso y el siseo de su cuerpo ante la leve cadencia de equilibrio le jugaba un posible baño nocturno. Alargó su brazo y tomó una cinta, ni siquiera miró el color, tan sólo la tomó y brincó en retroceso antes de que ante el movimiento de la plataforma acabase por perderle el equilibrio. Llegó a la superficie agitada, cayendo al suelo terrenoso mojada y casi exhausta por la flaqueza de su último punto. "Bien, pero ahora va a resultar más fácil coger las otras cintas ya que ya sé cómo va la cosa" Se enrolló la cinta adjudicada en su brazo como si un brazalete se tratase y comenzó de nuevo para ir a por el resto de cintas de colores para completar el reto.
Cayó de rodillas al suelo con sus manos aferradas a la tierra mientras el vaho salía agitadamente de su boca, estaba empapada por el agua, el sudor comenzaba a darle esa sensación de pegajosidad y sus piernas temblaban espasmódicamente por la influencia física desarrollada, río a carcajadas pensando en que al próximo día le iban a doler como mil demonios, pero se sentía viva después de tantos años estando clínicamente en ese estado mortuorio, encadenada a la vida y aferrandose a la muerte mientras sostenía en su mano derecha las cintas verde, roja, negra, amarilla y en su brazo descansaba chorreando la azul. "ah, ah, ah... jaja ya tengo las cintas... vayamos a llevaros con vuestro "papito" lindas... jajaja" pensaba mientras reía satisfecha con aquella sensación vivida. Se puso en pie y camino lentamente para apaciguar sus tendones dirección aula del profesor Alexander.*

[Cambio de escena, pero dejo rol abierto por si quieren seguir aqui con vuestra propia prueba]